Actúa oportunamente contra el ACV

Ataque Cerebral isquémico transitorio | Síntomas

Ataque cerebral isquémico transitorio

 Ataque cerebral isquémico transitorio

¿Qué es un Ataque Cerebral isquémico transitorio o (AIT)?

El ataque cerebral isquémico transitorio es un episodio temporal de disfunción neurológica ocasionada por un evento vascular oclusivo que genera un estado sintomático inferior a 1 hora (entre 2 y 15 minutos).

El AIT no está asociado a déficit neurológico permanente, sin embargo, puede proceder al desarrollo de un ataque cerebrovascular isquémico o infarto de miocardio. Según Navas C “presentar un AIT conlleva un riesgo de ACV en el primer mes de 8% y al año de 5%, junto con 5% de riesgo de infarto de miocardio al año”.

El mecanismo de oclusión vascular durante un ataque cerebral isquémico transitorio está relacionado en mayor proporción a tromboembolismo por lesiones en los vasos que irrigan el cerebro y con menor frecuencia por un evento embólico proveniente de los vasos aórticos.

El ataque cerebral isquémico transitorio según Navas C “puede virtualmente reflejar el compromiso de cualquier arteria cerebral o cerebelosa, superficial o profunda, de circulación anterior o posterior e igualmente de arterias perforantes de los ganglios basales y del tallo cerebral”. Como se mencionó en el post anterior, los síntomas de AIT relacionados con circulación involucrada (carotídeo o vertebrobasilares) se manifiestan en forma de:

Los AIT carotídeos suelen presentar los siguientes síntomas:

  • Disfunción motora de las extremidades y/o parálisis facial.
  • Pérdida de visión en el ojo.
  • Afasia (dificultad para hablar).

Los vertebro basilares se caracterizan por:

  • Disfunción motora de miembros superiores e inferiores y parálisis facial izquierda o derecha.
  • Pérdida de visión en uno o ambos campos visuales.
  • Presencia de dos o más de los siguientes: disartria (dificultad para articular sonidos y palabras), disfagia (dificultad para deglutir, incluso la propia saliva), diplopía (visión doble), vértigo, ataxia (pérdida de equilibrio o incoordinación de los movimientos).

¿En qué consiste el diagnóstico de un ataque cerebral isquémico transitorio ?

Todos los pacientes que se sospechen o presentan un AIT, requieren de una variedad de exámenes diagnósticos que pueden incluir neuroimagen, evaluación clínica neurológica, cardiológica y hematología para conocer la naturaleza del evento e iniciar con el control de los factores de riesgo y el tratamiento de prevención secundaria. Algunos exámenes ya descritos anteriormente, incluyen:

Angiografía cerebral: consiste en la visualización detallada de las arterias del cerebro y del cuello a través de la inserción de tubo un catéter que se dirigirá arterias principales y dentro de la carótida o arteria vertebral. Para esto, el médico que realice el examen deberá inyectar un tipo de sustancia que permita visualizar los vasos sanguíneos en las imágenes de rayos X.

Ecocardiograma: usa ondas sonoras para crear imágenes detalladas del corazón con el fin de encontrar el origen de los coágulos en el corazón que pueden haberse desplazado desde el corazón hasta el cerebro y provocaron el ACV.

Pruebas Hematológicas: son esenciales para la detección de las alteraciones hematológicas y metabólicas (diabetes, uremia, alteraciones de coagulación) que pueden estar asociadas al desarrollo de un ACV. Para ello, se realiza cuadro hemático y perfil químico.

¿Cómo evitar el riesgo de desarrollo de ACV tras presentar un AIT?

La prevención secundaria hace referencia a la modificación de los factores modificables (hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo, obesidad-sobrepeso, síndrome metabólico, arritmias cardiacas, enfermedad coronaria y drogas psicoactiva). A partir de esto, Navas C manifiesta un énfasis en:

  • Disminuir o suspender el consumo de cigarrillo sustancias psicoactivas y alcohol.
  • Tratar las enfermedades cardiovasculares.
  • Realizar actividad física de manera regular (30 a 60 minutos 3 a 4 veces por semana). Puede incluir actividades como correr, caminar o practicar algún deporte.
  • Control estricto control de la presión arterial.
  • Para pacientes diabéticos se recomienda niveles de glucosa de 126 mg/dl o menores en caso de haber presentado un AIT, según lo expone La Asociación Americana de Diabetes.
  • Lograr un índice de masa corporal (IMC) entre 18.5 a 24.9 K/m.
  • Se recomienda una circunferencia menor a 80 cm en mujeres y de 90 cm en hombres ya que la obesidad está asociada tanto a ACV como enfermedades cardiovasculares.

¿Cuándo acudir a un servicio de urgencias?

Como se ha expresado anteriormente, un ataque cerebrovascular es una urgencia médica y la acción temprana puede reducir los daños neurológicos y funcionales permanentes. De esta manera, si observas algún signo o síntoma de ataque cerebrovascular isquémico transitorio comunícate con 123. Los síntomas de alarma son:

A: No puede Alzar las manos

H: Se le dificulta Hablar

O: Visión alterada en un Ojo

R: Rostro o cara torcida

A: ¡Actúa!

Si deseas obtener más información acerca del diagnóstico y tratamiento del ataque cerebral isquémico transitorio puedes ingresar a nuestra página web: https://www.recavar.org

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