La importancia de las Unidades de stroke en el tratamiento de ACV (UTAC)

Unidades de stroke (Stroke Unit )

Unidades de stroke (Stroke Unit )
En el post pasado hablamos de la estructura de las Unidades de tratamiento del ataque cerebrovascular o unidades de stroke. En esta ocasión queremos resaltar la importancia de estos espacios en el tratamiento y proceso de recuperación de un ACV. 

Cabe recordar que las unidades de stroke son espacios físicos que disponen de un equipo humano multidisciplinario y de unos medios técnicos mínimos adecuados, imprescindibles para obtener los resultados esperados.

Los avances en el manejo de pacientes con ACV en los últimos años, incluidas las nuevas estrategias diagnósticas y terapéuticas, han permitido la reducción de la letalidad hospitalaria y el logro de mejores resultados funcionales.

Una de las principales mejoras en el tratamiento de ataques cerebrovasculares fue el establecimiento del concepto de unidad de ataque cerebrovascular cuyo objetivo es la precisión diagnóstica, la prevención sistemática de complicaciones a través de a monitorización adecuada, la atención médica y de enfermería especializadas y la rehabilitación temprana que incluye una preta valoración de la deglución (capacidad de tragar o comer que tiene el enfermo con ACV), para con ello evitar compromiso del a vía aérea y el desarrollo de infecciones respiratorias, que aumentan la estancia en el hospital, el costo de la misma y reducen el beneficios de las terapias de reperfusión .

Las primeras unidades surgieron en Norteamérica y Europa en la década del 70 y si bien no obtuvieron los mejores resultados en su inicios, fueron creando el espacio para las mejoras que terminaron por demostrar lo adecuado de estos espacios y de los grupos de multiprofesionales para tratar los ataques cerebrovasculares.

Con el tiempo se ha podido demostrar que las unidades de stroke (o Unidades de tratamiento del ACV - UTAC) disminuyen la mortalidad, a la vez que reducen la invalidez y la dependencia. No solo constituyen el soporte específico para las terapias de reperfusión, como la trombolisis, sino que además son el mejor tratamiento para los enfermos que no las hayan recibido. 

Algunos de lo beneficios de ser atendido en una Unidad de tratamiento del ACV son: 
  • Menor mortalidad
  • Mejor supervivencia en todos los grupos de edad y géneros.
  • Reducción de la incidencia de complicaciones posteriores al accidente cerebrovascular, como infecciones del tracto respiratorio y neumonía.
  • Mejor y más pronta evaluación de la deglución y menos complicaciones de la vía aérea.
  • Más pronta y oportuna movilización.
  • Mejor comunicación y educación a los familiares para así on¡obtener mayor reintegro a la vida familiar y social del paciente. 
Otro modelo es la unidad de rehabilitación que hace énfasis en la rehabilitación, y puede admitir pacientes desde el inicio del ACV y continuar su tratamiento por varias semanas o recibir pacientes que ya hayan pasado la fase aguda. 

La Brain Attack Coalition definió, en junio de 2000, los criterios mínimos para un centro de ACV. Estos requisitos incluyen: 

Existencia de un equipo multidisciplinario de ACV; empleo de protocolos de actuación escritos.

Integración de los servicios de emergencia médica al centro; departamento de emergencia con capacidades adecuadas para la recepción y manejo de pacientes con ictus.

Unidad de ictus, servicio neuroquirúrgico, servicio de neuroimagen;servicio de laboratorio que provea las investigaciones necesarias. 

Registro de datos relacionados con la atención médica que permita establecer estrategias para mejorar la calidad; educación médica continuada en ictus. 

De igual manera el ente discutió el concepto de centros de ataques cerebrovascular y propuso dos tipos de centros: primario en el que hay un personal, la infraestructura y los programas necesarios para estabilizar y tratar a la mayoría de los pacientes con ACV agudo.

Un centro integral de ataques cerebrovasculares que está definido como una instalación o sistema con el personal, la infraestructura, la experiencia y los programas necesarios para diagnosticar y tratar a los pacientes con ACV que requieren atención médica y quirúrgica de alta intensidad, pruebas especializadas o terapias de intervención. 

Para ambos casos, son necesarios ocho componentes para una completa asistencias y trato de pacientes: médicos, enfermeras capacitadas para tratamiento del ACV, disponibilidad de tomografía computarizada del cerebro las 24 horas, prioridad de CT para el ataque cerebrovascular, ecografía Doppler extracraneal y transcraneano, monitoreo electrocardiográfico automatizado, protocolos intravenosos de rt-PA las 24 horas del día y un departamento de emergencias.

Estándar de Procedimientos Operativos

Todos los procedimientos deben estar bien descritos y deben ser conocidos por todo el personal. Por lo tanto, un manual de ataque cerebrovascular médico y de enfermería que los describa y los califique para luego transmitirlo a todo el personal, son instrumentos importantes de las unidades de stroke. 

Estos procesos deben documentarse en el manual del ACV y deben revisarse de acuerdo con la evaluación de las experiencias. También es importante medir los datos sobre el tipo, la gravedad, los procedimientos y los resultados del ataque cerebrovascular de forma regular para mejorar continuamente los procedimientos. 

Las consecuencias de un ataque cerebral son graves y no solo las sufren los pacientes sino todo el entorno familiar. Por eso es indispensable actuar con prontitud cuando se presentan síntomas de un ACV, pues cada segundo mueren 32.000 neuronas que controlan alguna función de nuestro cuerpo.

Con estas unidades lo que se pretende es actuar de manera rápida y efectiva, pues las primeras horas de un ACV son vitales ya que esa ventana debe aprovecharse al máximo para iniciar tratamientos de reperfusión, neuroprotectores, o la combinación de ambos.   

Recuerda que si sientes o ves que algún conocido o familiar presenta alguno de los síntomas debes actuar lo más rápido posible, por eso ten en cuenta el acrónimo:  

A: No puede Alzar las manos
H: Se le dificulta Hablar
O: Visión alterada en un Ojo
R: Rostro o cara torcida
A: ¡Actúa!

Si deseas obtener más información acerca del manejo o cómo tienes que actuar cuando el ACV, puedes ingresar a nuestra página web: https://www.recavar.org/